La presidenta regional, Cristina Cifuentes, presentó este lunes el borrador de anteproyecto de la nueva Ley de Urbanismo y Suelo de la Comunidad de Madrid, una iniciativa largamente demandada por el sector inmobiliario madrileño y que debe estar encaminada a clarificar y poner orden en la gestión del urbanismo de la región, sustituyendo a la actual Ley del Suelo regional, que data de 2001.

En sus 15 años de vigencia, el actual texto ha sufrido hasta 15 modificaciones parciales, que, como admiten desde la propia Consejería de Medio Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio, han acabado por hacerlo «de difícil entendimiento e interpretación».

«En estos 15 años de vida, las circunstancias han ido cambiando de manera considerable, por lo que el contenido de la Ley del Suelo se ha desvirtuado por completo», reconoció ayer Cifuentes durante la presentación del documento. «Esta nueva ley se configura como un auténtico código único que dota de coherencia a la normativa urbanística», añadió.

El objetivo del Gobierno autonómico es presentar el Proyecto de Ley en la Asamblea antes de que acabe el año, en donde, según Cifuentes, pretenden conseguir «el máximo consenso y apoyo posible». Es algo que se antoja prácticamente imposible, teniendo en cuenta que tanto PSOE como Podemos se levantaron, ya hace ocho meses, de las mesas técnica y política en las que se ha ido gestando el texto presentado ayer.

Tampoco ayuda el hecho de que Ciudadanos haya decidido poner «punto y final» a estas mesas de trabajo de forma unilateral «para buscar nuevos consensos», según anunció la semana pasada su portavoz en la Asamblea, Ignacio Aguado. La idea de la formación naranja es buscar el máximo apoyo político para aprobar la Ley, para lo que aboga por trasladar el trabajo de estas mesas a la ponencia específica sobre la Ley del Suelo que ya existe en la Asamblea.

@entrammbasaguas