Madrid

Continúan cayéndose los árboles en Madrid

Cuando en junio de 2016 los vecinos de la humilde Colonia Casilda de Bustos, en el barrio de Las Águilas (distrito de Latina), cayeron en la cuenta de que sus parques y jardines habían sido abandonados a su suerte, llevaban meses preguntándose por qué ningún operario acudía ya por allí. «Cuatro meses, por lo menos», advierte enseguida una señora de avanzada edad. Los suficientes para que gran parte del patrimonio del barrio entrara en barrena, después de más de 50 años de mantenimiento municipal.

Sin previo aviso, el Gobierno de Carmena había retirado en febrero el cuidado y vigilancia de un sinfín de sectores verdes, en una decisión que, además de la evidente merma medioambiental, entrañaba, a tenor de la masiva caída de árboles que asuela la zona, un grave riesgo para el vecindario.

Desde el verano de 2015, un total de 17 árboles -algunos, de colosas proporciones- se han venido abajo. El último sin ir más lejos, el sábado pasado. Pasadas las 10 de la mañana, un pino de más de 20 metros de altura cayó a plomo a la altura de un paso peatonal que separa un bloque de viviendas (General Romero Basart, 2) del colegio Alcalde Móstoles.

Esta vez, pese a que la casualidad quiso que el derrumbe tuviera lugar en un día no lectivo y el centro estuviera desierto, no son pocos los habitantes de la colonia que se preguntan si la desgracia está hoy más cerca que nunca.

@entrammbasaguas

25 enero, 2017

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