Ciudadanos y su Presidente Albert Rivera han conseguido que Montoro claudique ya que si no se reducía el IRPF no aprobarían el techo de gasto.  Yo creo que los impuestos efectivamente hay que bajarlos, pero yo lo que hecho en falta en Ciudadanos es que proponga alguna reducción de gasto público. Ciudadanos introdujo en los Presupuestos Generales del Estado de 2017 propuestas de incrementos del gasto público por valor de 4000 millones de euros. Ya que este partido se presenta como un partido reformista, sus exigencias podrían ir por otro camino: por ejemplo, sólo lo que son los servicios públicos de empleo estatal tienen 763 oficinas en toda España. Y tienen más de 5400 empleados públicos sólo del Estado, porque cada oficina de empleo de esas 763 comparten también sede con las oficinas de empleo regionales, porque el empleo regional depende de las Comunidades Autónomas. Y si las del Estado tienen 5400 las otras tienen bastantes más del doble. Ahí habría algo que racionalizar. Seguimos viendo también muchos inmuebles públicos que siguen funcionando, en vez de concentrar sedes que muchas veces son Consejerías las que hay a nivel autonómico demasiado ostentosas.  Es decir, donde está lo difícil en realidad es en reducir gasto.

Y además seguimos sin cumplir con el déficit. Pese a que los ingresos van mucho mejor, no estamos cumpliendo. Sigamos sin disminuir la deuda cuando estamos en crecimiento económico y veremos las consecuencias cuando nos venga una nueva crisis.  La cuestión aquí es que el gobierno ya empezaba a decir que en el 2019 va a haber algún tipo de gesto hacia reducir impuestos y Rivera se quería apuntar el tanto y decir: o los bajáis en el 2018 gracias a mí o nada. A mí me parece que tiene difícil explicación la reducción del IRPF ahora y sobre todo como pide Rivera a las rentas bajas. Porque cualquier reducción aunque sea de décimas a las rentas bajas son miles de millones. Es menos popular bajar impuestos a las altas que son muy pocos. Se acabará haciendo como digo algún gesto, pero lo que pide Rivera teniendo en cuenta nuestra situación en lo que a déficit se refiere, es complicado de vender de cara a Bruselas y de cara a la seriedad de España como país. No se está reduciendo lo que se debiera el gasto público. La estructura administrativa tampoco se está reduciendo. El secreto está en coger esa estructura administrativa organismo por organismo y ver como se puede reducir.

El planteamiento de Montoro era muy coherente, porque es el de todos los Ministros de Hacienda. Lo que dice es: hay que reducir el déficit público, hay un incremento de impuestos y al final del ciclo, cuando se viene un nuevo proceso electoral pues efectivamente los bajo. Además tienes que mandar un mensaje a Bruselas porque tienes que salir del Procedimiento de déficit excesivo. Vamos a salir a finales del 2018, antes no se debería producir una rebaja fiscal.

Ojalá bajaran los impuestos siempre, a mí lo que me parece irresponsable es que si no estamos cumpliendo aún el déficit y además justo después de haber aprobado los Presupuestos del 2017 (con lo que ha costado) vengamos ya con exigencias para los del 2018. Estéticamente no queda nada bien. Y reitero: ojalá se pudieran bajar siempre los impuestos, pero en nuestra actual situación de incumplimiento de déficit y teniendo que lanzar un mensaje claro a Bruselas no me parece serio lo que ha hecho Ciudadanos. De hecho si seguimos con un déficit excesivo es entre otras cosas porque no se está reduciendo el gasto y ahí Ciudadanos aboga por seguir subiéndolo.  Demostración de que esto no tiene nada que ver con la economía y sí con un juego político. Es un intento de Rivera de decir que si bajan los impuestos es gracias a él.

Decir que hay que bajar impuestos es popular y da votos. Y por otro lado decir que hay que subir el gasto también es popular y da votos.  Nos hemos metido en un problema de política, pero algunos como economistas que somos tenemos que decir algunas cosas al respecto. El Señor Rivera se ha callado la parte impopular, es decir, que si quiero cumplir el déficit con la Unión Europea tengo que bajar gastos. Como economistas hay que decir que pueden bajar los gastos y de hecho hay que bajarlos. Ya sé que esto es creer en un país en el que no vivo, pero se pueden bajar los gastos y mucho. Empezando por los municipios, que ya sé que están muy controlados, pero se puede administrativamente bajar los gastos de los municipios. Más de 8000 municipios en España son muchos municipios, se pueden reducir a la mitad o incluso más.

Continuando por las Comunidades Autónomas. Esta broma pesada que tienen las Comunidades Autónomas que cuando llegan al Consejo de Política Económica y Fiscal  se quejan porque les imponen un 0,3 y luego un 0 y dicen que todo el ajuste es para ellas. Falso. No todo el ajuste es para las Comunidades porque contablemente queda oculto que el Estado les facilita financiación para los desmanes que han tenido en otro momento a través de la deuda pública. Parecería que todo recae sobre las Comunidades pero como digo es falso.

Y continuando por el Estado. Podríamos entrar en los Presupuestos y hay montones de partidas que estoy seguro que se podrían recortar.  No sin daño a algunos beneficiarios, pero con una gran mejora para la mayoría de los ciudadanos y contribuyentes.  Eso por el lado del gasto.

Y todo esto permitiría no tanto una reducción de impuestos que como digo me parece en este preciso momento complicado de cara a Bruselas y que es un juego político de decir yo te tomo la delantera y los quiero bajar antes que tú, pero sí se podría proponer por ejemplo cambiar totalmente el sistema fiscal español. IVA: un único impuesto para todos igual. IRPF: mejorar ese sistema, quitando por un lado exenciones y reduciendo los tramos muchísimo: 2-3 tramos.  Sociedades: Lo mismo.  Hay que poner un tipo impositivo que se pague, que lo paguen todos, que no sea dañino para la innovación, para la creación de empresas… ¿Qué pasa? Que quienes lo tienen que hacer son los principales perjudicados, es decir,  las personas que ostentan el poder, que ostentan la burocracia, que manejan los gastos y los ingresos…

Yo veo que no hay ilusión por hacer esto, pero lo que se debería proponer y más si uno se presenta como reformista es un cambio total en nuestro sistema fiscal. Pero claro, eso no da votos. Menos bandazos fiscales provocados por los vaivenes políticos y más reformas serias del sistema fiscal.

Álvaro Lodares (Economista)

@lodares