Son días de hacer propósitos: dejar de fumar, hacer deporte, apuntarme al gimnasio, aprender inglés, adelgazar….Casi todo material. Voy a comprar un teléfono móvil nuevo, voy a renovar mi Tablet, quiero hacer un viaje…Pero poco espiritual.
Deberíamos proponernos ser más felices, disfrutar de los pequeños placeres que nos da la vida: un café con un amigo, hablar con la persona que hace mucho que no ves, ver una película, estar un rato con tus hijos…y sobre todo ser mejor persona.
La vida es muy corta y la muerte muy larga. A veces olvidamos esto y estamos todo el día haciendo daño al prójimo. Hagamos reflexión para ser mejores persona, mejores padres, mejores amigos, mejores trabajadores… Haremos una sociedad mejor y dejaremos una mejor calidad de vida a nuestros hijos.
He comprobado como la mayor crisis que jamás ha tenido España ha cambiado los valores de muchas personas. Hoy estamos más tristes, somos menos felices, vamos cabreados por la calle… Sin ir más lejos, he percibido las navidades más tristes que recuerdo. Y he podido compartir este sentimiento con gente con la que he hablado estos días. No hay alegría en la gente, en celebrar estas fiestas, en participar en la alegría de la navidad.
Mis propósitos para este año van a ser cambiar todo esto. Construir una sociedad mejor, donde prevalezca más la unión que la desunión, la alegría que la tristeza, la ilusión que la desilusión, la amistad que la enemistad, el trabajo que la pereza, leer un libro que ver ciertos programas de la tele…
Y tú, ¿Qué propósitos tienes?
Espero tus respuestas.
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