El Ministro de Hacienda ha adelantado que planea una rebaja del IRPF más amplia de lo que ha pactado para el siguiente ejercicio con Ciudadanos. Recordemos que la rebaja fiscal que el gobierno pactó con Ciudadanos para el próximo año, cuando en teoría haya presupuestos, suma unos 2000 millones de euros y va dirigida a las rentas bajas.
Cristóbal Montoro ha hablado de prima fiscal a las personas de cierta edad, pero no ha explicado más. Así que toca especular un poco para ver por dónde pueden ir los tiros. Varios detalles:
Primero: Ahora en la tarifa del impuesto vigente no discrimina por edad.
Segundo: el PP prometió en su día exonerar de pagar el IRPF a los asalariados que después de alcanzar la edad de jubilación sigan trabajando. Sin contabilizar los autónomos son unos 50.000 los que figuran como trabajadores con más de 65 años.
¿Cuándo se pondría en marcha todo esto? Parece que se dejaría para más allá de 2018, es decir, el gobierno aprobaría esas nuevas rebajas fiscales en 2019. Coinciden con elecciones autonómicas, locales y quién sabe si legislativas.
A mí esto me parece bien, hay que fomentar la bajada de impuestos, pero el asunto es ¿Por qué a las rentas bajas? ¿Por qué no a todo el mundo? Además si la idea es fomentar el crecimiento, la estrategia no es a las rentas bajas. La mayor parte de la recaudación del IRPF no se produce en las rentas bajas, se produce entre los 30.000-60.000 euros. Por tanto si lo que se pretende es fomentar el ahorro, la inversión y la canalización de todo ello hacia los canales financieros, bájese la fiscalidad a esas rentas que es donde está la parte más importante del pastel, no en las bajas.
Aquí hay un sesgo político claro, que es lo que pide Ciudadanos. Recordemos que el sí de Ciudadanos a los Presupuestos cuando en teoría se iban a aprobar llegó por este acuerdo fiscal de 2000 millones de euros para las rentas bajas, fue entonces. Además se negoció entre Garicano y Luis de Guindos. El gobierno lo aceptó, pero se dejó claro en su momento que esa era la reforma que se pactaba con Ciudadanos, pero que el gobierno tenía su propia reforma en mente. Ahora está empezando a enseñar la patita. De momento habla de deducciones, de esa prima fiscal a contribuyentes de cierta edad (veremos qué son esos contribuyentes de cierta edad). Pero auguro que va a venir más.
Yo tengo la sensación que Montoro ha querido corregir rápidamente la parte política a esa sacada de pecho de Ciudadanos de apuntarse ellos el tanto. Aquí (para que lo entienda todo el mundo) la negociación no va a ser con Ciudadanos, va a ser con el PNV. Y por eso la negociación que me imagino que empezará en el próximo año (independientemente de lo que pase en Cataluña) será muy interesante. Las rentas bajas que pasen de 12000 a 1400 euros (el mínimo exento) me alegro mucho por ellos, pero es que el argumento que dan precisamente para que esta gente esté exenta es que quieren estimular su capacidad económica y estimular el crecimiento. Si ese es el argumento y quieres realmente estimular la capacidad de esas personas de consumir y que esas personas ayuden al crecimiento económico de España, lo que hay que hacer es bajar los impuestos precisamente como digo a esa gran parte de los contribuyentes españoles donde está el gran trozo del pastel. Con el mismo argumento: estimular la capacidad económica y el crecimiento.
Te dirán que no lo permite la recaudación. Vamos a verlo. La permisibilidad de la recaudación estará en función del pacto que haya con el PNV. Y hay un detalle importante: supuestamente el próximo año España sale del procedimiento de déficit excesivo. Es decir, su déficit está por debajo del 3%. Ya Bruselas no te tiene que dar el visto bueno a ciertas cosas.
Para que nos hagamos una idea: esto afectará a unos 2.500.000 personas. Realmente si esto se aplicara a partir de 2018, a nadie se le escapa que estamos en periodo electoral y por ello ya se sabe que si Ciudadanos dice 2, el PP va a decir 4. El problema que plantea esto para enjuiciarlo es que todo esto se pergeña con un equipo de técnicos, fiscalistas y todo lo demás por una parte y luego con un grupo de gente experta en cuestiones electorales por la otra. De suerte que cada bajada, cada grupo tiene un toma y daca electoral. Es un encaje de bolillos finísimo. No sabemos exactamente cuántos votos ganan y cuántos pierden con este tipo de decisiones.
En las rentas bajas (menos de 18000 euros) es verdad que se venían beneficiando de deducciones por familiares dependientes y por familias numerosas. Pero yo creo que llega un momento en el que ya sobre todo con el fiasco que ha habido en las CCAA otras muchas rentas se tienen que beneficiar de esas deducciones por personas dependientes o por tener familias numerosas. Es decir, el gran tema es precisamente si queremos incentivar la natalidad en España (estamos a la cola de Europa) y esto plantea una serie de problemas. Y para ello lo que hay que hacer no es precisamente a los jubilados animarles fiscalmente con las familias numerosas, ellos ya no están en esas. Están otras personas, con otra fiscalidad y otra cotización. Esa es la clave del éxito. Eso sí, no desanimemos al Señor Montoro a hacerlo. Que salga todos los días haciendo anuncios fiscales, de rebaja claro.
De todas maneras hay una cosa que me sigue preocupando: que no haya una reforma profunda del sistema fiscal español. A base de estos pellizcos no se sabe muy bien donde vamos. No sabemos muy bien hacia donde vamos porque no estamos mirando a la otra variable (que es la importante realmente): el gasto público. Es decir, se habla de impuestos como si los impuestos fueran una variante independiente, cuando realmente lo que controla el nivel impositivo es el gasto. Sabemos que no están dispuestos a acortar el gasto. A pesar de todas las acusaciones que tienen en la oposición de austericidas y más lindezas. A pesar de todo eso las cifras, que son tozudas, dicen que el gasto público ha ido aumentando. Lo que pasa es que como ingresan mucho, se maquilla.
Álvaro Lodares (Economista)
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