En toda regla. Oro líquido. Los aceites de Jaén se han convertido, con el paso de los años, no sólo en referencia gastronómica en España sino en nuestros embajadores a nivel mundial. Por su pureza, por su sabor, por su olor… ahora hasta por su presentación.

En Conde de Argillo hemos descubierto la producción de virgen extra de la variedad de aceituna Picual con una calidad máxima que es resultado del cariño y la técnica que se aplica en todas las fases del proceso: desde la recolección hasta la producción, el envasado y la propia comercialización.

Un aroma fresco y afrutado que se consigue gracias a la recolección temprana del fruto en el mes de octubre con procedimientos respetuosos con el medio ambiente. Al comensal le llega una colección de regalos, joyas por descubrir y degustar: el Aroma Picual de 500ml en dos frascos de cristal de una belleza y originalidad felizmente conseguidas, el Malla Dorada que con su tapón irrellenable aporta al consumidor garantía y autenticidad, el Serie Oro que con su toque armónico y equilibrado hace notar el intenso aroma de la aceituna verde…

Conde de Argillo, desde la Finca Arroyovil en las estribaciones de Sierra Mágina, es la prueba de que las cosas bien hechas -también en la gastronomía, en la mesa y el mantel- se palpan con los cinco sentidos. ¡A disfrutar!