Por sus hechos les conoceréis. Ahora pretenden llenarlos de tierra. Borrarlos. Lo del concejal Zapata pero multiplicado por mil. Porque mil son las ofensas, las humillaciones, las agresiones de toda índole que los podemitas han perpetrado contra la gente de bien, contra las instituciones del Estado, contra todo aquello que nos ha dado seguridad y libertad.

El de arriba es un vídeo que retrata el carácter violento, facineroso y antidemocrático de quienes luchan -con cócteles molotov si es menester- para erigirse en la neocasta, para levantar un monumento al pensamiento único y al horror. El reloj para evitarlo está en marcha. Es una bomba de relojería.