Los atracadores que ayer decidieron entrar a la fuerza a las oficinas de la discoteca Kapital debían de manejar información. No se entiende si no que entraran «al azar» en las oficinas que la mítica discoteca Kapital posee justo en el portal de al lado del local, en el número 125 de la calle Atocha. En uno de los pisos de ese portal, la discoteca tiene su «centro de operaciones», donde trabajan a diario en horario laboral varios administrativos, que llevan la contabilidad, facturas, contratos, promociones y demás papeleo del local hostelero.

Poco después de las 19:30 horas, tres individuos encapuchados entraron en el portal y la primera víctima fue el portero de la comunidad de vecinos, que fue maniatado, según explicó ayer una portavoz de la Jefatura Superior de Policía Madrid. Probablemente querían asegurarse de que no iba a dar la voz de alarma ante el atraco que iba a tener lugar instantes más tarde.

Después se dirigieron hacia la oficina de la discoteca Teatro Kapital, que también conecta con una de las plantas de la discoteca, según fuentes policiales. Allí, maniataron a la empleada de la empresa y le exigieron la recaudación, según las mismas fuentes.

En el momento que se estaba produciendo el atraco se encontraba en el interior de la discoteca el «maitre» del establecimiento hostelero, realizando labores de inventariado. Al parecer, los tres asaltantes iban encapuchados y llevaban un arma de fuego para amenazar a las víctimas, aunque se desconoce si se trata de un arma real o era simulada y simplemente la llevaron para amedrentarlos.