Que la deuda de España esté mucho mejor valorada que la de Cataluña en particular no es casualidad. Que los costes por financiación del país sean tremendamene inferiores a los de la región, tampoco. Y que España esté a un buen nivel internacional y Cataluña al nivel de Zambia viene dado por ciertas gestiones. Y eso es extrapolable a todas las regiones nacionales.

Y es que la Comunidad de Madrid consiguió ayer colocar 700 millones de euros a través de una emisión pública de bonos a cinco años con el interés más bajo de su historia para un bono de esas características (0,727 %). Esta emisión pública, la primera llevada a cabo desde que Cristina Cifuentes es presidenta de la Comunidad.

La emisión de ayer estuvo liderada por BBVA, HSBC, GSI, Banco Santander y Banco Sabadell, y en ella han participado inversores extranjeros, que han acaparado casi el 35% de la emisión, liderados por Alemania, Austria, Suiza, Portugal, Holanda, Francia y los países nórdicos.

Entre los inversores se encuentran fondos, bancos, compañías de seguros y bancos centrales. En la operación llevada a cabo en la mañana de ayer se superó el objetivo fijado para esta emisión, con la que se pretendían captar alrededor de 300 millones de euros, que al final han sido 700 millones debido al bajo coste y con el fin de cubrir peticiones adicionales de algunos inversores en este bono.

Además, a esta emisión de deuda celebrada ayer se suman dos operaciones de emisión de deuda ya cerradas en 2016. Se trata de una emisión con un emisor privado a treinta años por importe de 300 millones de euros a un interés del 3,25%.

Hay que tener en cuenta que la última colocación a treinta años de la Comunidad de Madrid fue por un importe de 10 millones de euros a un interés del 5,25%.

Por otra parte, la Comunidad ha cerrado un préstamo bilateral con una entidad de crédito por importe de 141 millones de euros a ocho años y a un tipo de interés del 1,15%.