Después del «regalito envenenado» de la victoria, por escaños que no por número de votos, del nefasto independentismo catalán en las elecciones ¿autonómicas?, referéndum encubierto y estupidez del señor Rajoy del pasado día 21 de diciembre, Catalunya humilla a Madrid futbolísticamente y en momento bien inoportuno. En la noche del 22 y la mañana del 23 Espanyol de Barcelona y Barcelona CF vencieron, como todo el mundo sabe y respectivamente, al Atlético de Madrid y al Real Madrid. Justo lo que faltaba para que las masas «culé» y «periquita», fanatizadas en gran parte por el independentismo, añadan a su rebelión que sin duda continuará la burla y el cachondeo.

Muy oportunos esos dos «macroentrenadores», el «tontito » Zidane y el «feroz» Simeone, en el culmen de la mala campaña que sus pupilos rojiblancos y merengues están ofreciendo a sus seguidores que nos acabamos de ver apuñalados por la espalda con esos dos resultados, resumidos en el Catalunya 4 – Madrid  – 0. Y es que ambos «coachs» están sobrando en sus respectivos clubs aunque sus Presidentes se empeñen en hacernos creer en la conveniencia y necesidad de que continúen  en sus puestos, Zidane después del «casi ridículo» del Real en el reciente «mundialito de clubes», aunque lo haya ganado de milagro frente a dos contrarios inferiores y desconocidos, y Simeone tras el  reiterado  fracaso de  diecisiete partidos de liga en los que apenas ha conseguido hacer un poco más de un gol por encuentro, aparte del sonado «refracaso» de la eliminación de la Champions a manos de otro desconocido acerbayano.

Son muchos  los seguidores madridistas y atléticos que hace tiempo que están convencidos de que Zidane y Simeone han cumplido sus ciclos y  están de más futbolísticamente en ambos equipos capitalinos. Ni la «tonta» sonrisita permanente de Zidane ni el fiero liderazgo de Simeone sirven ya para mucho en dos vestuarios, prácticamente iguales a los de años anteriores, pero que en absoluto responden del mismo modo que antaño. Y no digamos ahora con la cólera que ha provocado la «política coincidencia» de esos resultados frente a Espanyol y Barca, en «ayuda» al perverso independentismo de Puigdemon, Junqueras y compañía de rebeldes y traidores en fuga o en más que justa prisión.

De modo que, señores Zidane y Simeone, no sólo han decepcionado deportivamente a sus aficiones sino, lo que es más grave, han decepcionado a España y la causa de su unidad atacada y ofendida. Por supuesto ya sé que en cuanto a seguidismo separatista no se puede meter en el mismo saco a los seguidores del Espanyol y los del Barcelona, pero en este caso coincidente será  el burlón  independentismo  el que se ocupará, se estará ocupando, de identificarlos. Ha llegado la hora de que Real Madrid y Atlético cambien de entrenadores, como ha llegado el momento de que la pobre y confusa España cambie de Presidente y Partido en el Gobierno, derrotados junto a  «Madri» y «Aleti» el 21 de diciembre e incapaces de eliminar el fantasma independentista que seguramente a continuará cerniéndose sobre esta Patria ofendida y humillada por tanto traidor no violento. O sea que «Ala Madrid·, «Aupa Aleti» y Arriba España pero con Rajoy, Zidane y Simeone en su casa.

Manuel Monzon