Madrid, Opinión

La renovación del PP

La semana pasada Esperanza Aguirre presentaba su libro “Yo no me callo”. A pesar de venir sin dedicatoria, sus 344 páginas tienen dos destinatarios claros: cualquier persona que haya sido votante del PP en el pasado y, sobre todo, el actual afiliado del PP.

Para los primeros, Aguirre pormenoriza en un entretenido relato cómo ha vivido desde la primera línea política acontecimientos sucedidos desde el año 2004 hasta hoy. Siempre desde la primera persona, desvela intrigas palaciegas que muchos ya sabían y la mayoría sospechaban, y ofrece un reposado y extenso análisis de por qué el Partido Popular ha perdido un tercio de sus apoyos desde las Elecciones Generales de 2011. Fallos en la comunicación, casos de corrupción y, en mi opinión, lo más importante: la actual indefinición ideológica del Partido Popular.

Abordando el tema del distraído ideario popular, se me venía a la cabeza la charla de Andrea Levy en el último campus de verano organizado por NNGG de Madrid en El Escorial el pasado mes de julio, cuando un afiliado de NNGG preguntó por la actual línea ideológica del PP. Andrea Levy contestó de forma vehemente que la línea estaba muy clara e incluso lo repitió en varias ocasiones. El mensaje de que la línea estaba clara quedó cristalino, pero el detalle de por dónde pasaba esa línea, quedó nuevamente sin resolver.

En clave de futuro para el PP, Aguirre apuesta por una renovación interna e invita a pasar página de aquél rocambolesco “si alguien se quiere ir al partido liberal o al partido conservador, que se vaya” pronunciado por Rajoy en Elche la primavera de 2008. Reconoce que el PP ha pasado de ser el partido que obtuvo unos resultados electorales como ningún partido los había tenido en nuestra Historia, a ser considerado un “nasty party”: un partido antipático para el común de la sociedad.

Este lunes, Margallo sostenía en El País que «Abrir la sucesión de Rajoy pondría en riesgo el futuro del PP». En la encuesta publicada también por El País el 6 de marzo, el 47% de los aún votantes del PP consideraban que el tiempo de Rajoy había pasado; esta cifra ascendía al 80% si se le pregunta al común de la ciudadanía. El diagnóstico de Margallo, compartido por la Ejecutiva del Partido, es lo que verdaderamente está poniendo en riesgo el futuro del PP. Lo que se propone como remedio (continuidad de Rajoy) es en realidad la enfermedad.

Llegados a este punto, en el que ni siquiera los afiliados disponen de mecanismos internos como para solicitar la celebración de un Congreso en el Partido Popular, es necesario buscar alternativas con la intención de manifestar el sentir de muchos españoles.

Red Floridablanca, ha lanzado una petición abierta a firmas para solicitar la convocatoria de un Congreso abierto en el Partido Popular. Con el objetivo de devolver la ilusión a los votantes perdidos y conseguir un Partido Popular que vuelva a aunar las distintas sensibilidades que se ubican a la derecha de la izquierda, ya tienen mi firma.

#QuieromásPP

19 abril, 2016

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *