Los principales partidos utilizan la campaña electoral para regalarnos los oídos con promesas de resolución de problemas, dádivas con dinero del Estado e incluso vendettas contra los que gobernaron anteriormente. Pero por lo general esos regalos tienen una parte amarga que nadie suele contar. Veamos algunos ejemplos reales:
PP: Conciliación de la vida laboral y personal y finalizar la jornada a las 18:00. Si bien es muy apetecible para los que trabajamos más allá de las 8 horas diarias, introduce un elemento regulador y una rigidez adicional que puede derivar en ineficiencias y posteriores pérdidas de empleo.
Ciudadanos: Complemento de renta para salarios por debajo de un umbral. Puede parecer a primera vista una buena idea, solidaria y que beneficia a las rentas más bajas, pero dado que no se puede contratar por debajo del SMI si ese umbral está por encima, siempre se contratará por el SMI ya que el Estado cubre la diferencia y si el umbral está por debajo, no tiene sentido. Por lo tanto lo que probablemente ocurrirá es que los contratadores “racanearán” en los salarios más bajos hacia el SMI.
PSOE: En general todas las partidas de “gasto social” que promete el partido del puño y la rosa tienen un destinatario etéreo. Se prometen muchos observatorios y planes de fomento para los que se destinan grandes partidas millonarias. No se engañen. Ese dinero queda en manos de los burócratas y si llega el 25% del presupuesto a su fin último ya será mucho. Todo ello contra sus impuestos, amable lector.
Podemos: Incrementar la fiscalidad a “los ricos”. ¿Quiénes son los ricos? Pues como se ha demostrado una y otra vez, los ricos es cualquiera que gane más que yo. Por lo tanto los impuestos se le suben a todo el mundo. Más aún cuando los verdaderamente ricos tienen capacidad para huir de cualquier corralito, impuesto, etc. ya que tienen fuera del país recursos suficientes para ello.
Por lo tanto guárdense mucho de aceptar las promesas de cualquiera sin al menos un breve análisis porque que se pueden arrepentir.
Socio Fundador de El Club de los Viernes
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