Diana Fernández

La venganza de Netanyahu, presidente de Israel, ha comenzado. Después de que el viernes el Consejo de Seguridad de la ONU aprobase una resolución en la que se declaran ilegales los asentamientos en territorio palestino, porque se considera una violación del derecho internacional, el dirigente israelí ha cortado de forma momentánea las relaciones con los países que votaron a favor de la resolución que condena los asentamientos judíos. Netanyahu aseguró por televisión que “aquellos que estén contra nosotros serán derrotados, porque pagarán un precio diplomático y económico por sus acciones contra Israel”.

El ‘castigo’ del dirigente israelí consiste en suspender las actividades y las reuniones entre sus ministros y cualquier representante diplomático de los 12 países que votaron a favor para que la resolución saliese adelante. El veto en concreto es a España, que presidía las sesión, Rusia, Francia, Reino Unido, China, Japón, Egipto, Uruguay, Angola, Ucrania, Senegal y Nueva Zelanda y se mantendrá hasta que Donald Trump se instale en la Casa Blanca.

Netanyahu, que considera que el último consejo fue “hostil”, cree que esto es una jugada sucia para su eterno aliado Estados Unidos, que era quien podía ejercer el derecho a veto a la hora de votar si aprobar o no esta resolución y finalmente tomó la decisión de abstenerse dando vía libre a que saliese adelante la propuesta. Cabe recordar, que las resoluciones solo pueden aprobarse cuando uno de los cinco países que conforman el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (China, Francia, Estados Unidos, Federación de Rusia, Reino Unido) se abstienen a la hora de imponer su veto.

La resolución 2334 recoge expresamente que se ponga “fin inmediato” a los asentamientos israelíes en territorio palestino y pide que “se distinga entre el territorio del Estado de Israel y el ocupado desde 1967”. 

El mismo día de Navidad, Netanyahu convocó una reunión con los representantes internacionales para transmitir su desencanto y molestia con la resolución que finalmente se había llevado a cabo. Y aseguró que detrás del veto estaban los hilos de Barack Obama. Esta ha sido la primera ocasión en la que Obama no ha vetado una resolución que Israel consideraba “hostil”. El dirigente israelí aseguró al secretario de Estado John Kerry, que “los amigos no someten a sus amigos ante el Consejo de Seguridad”. Tras el resultado, Netanyahu aseguró que replantearías las relaciones y que eliminaría contribuciones a cinco organizaciones de la ONU que suman 7,8 millones de dólares.

LA GUERRA DE LOS SEIS DÍAS

La conocida guerra de los seis días ocurrió en 1967 y en ese conflicto Israel conquistó territorio palestino, más en concreto el desierto del Sinaí, la Franja de Gaza, Samaria y Judea. Hasta el momento se han podido contar 250 asentamientos israelíes a lo largo de la Ribera Occidental, lo que supone una cifra aproximada de 570.000 personas a día de hoy.

Los conflictos se remontan hasta la fecha indicada ya que aunque las colonias israelís pertenezcan a territorio palestino, a nivel de gobierno, pertenecen a la administración de Israel.