Madrid, Opinión

¿Cuál es el problema presupuestario de España?

El paso dado respecto a sancionar en este caso a Extremadura y Aragón y avisar a otras diez regiones me parece que va en la buena dirección y además en mi opinión se debería hacer con todas las Comunidades Autónomas incumplidoras se llamen como se llamen. No solo con aquellas en las que es relativamente fácil hacerlo porque no se recibe allí una fuerte contestación.

Pero eso significa que lo tiene que hacer este gobierno y el que venga. Y no sólo con el pago a proveedores sino con el control de otro tipo de gastos. Por ejemplo, ¿lo que se está planeando por parte del tripartito que quiere gobernar va a tener un Ministro de Hacienda que se atreva a embridar a las Comunidades Autónomas?

El problema es que algunos –por ejemplo los señores de Podemosquieren un déficit a gogó ya que no tienen problema con el gasto porque luego los ingresos aparecerán de forma misteriosa: por ejemplo 7 millones.

La Autoridad Fiscal Independiente se creó porque así nos lo pidió Bruselas. Para que estuvieran enterados de todas las determinaciones que tomara Hacienda bajo sus recomendaciones y ahora se sienten ninguneados porque digamos que se les ha hecho poco caso.

Ellos advirtieron respecto a la desviación del déficit. A Hacienda nunca le ha gustado esta autoridad. No ha habido unas buenas relaciones.

Y es que manejar los impuestos y hacer la guerra son las dos funciones más importantes de gobernar. Si esta Agencia Independiente quiere hacer eso, realmente está sustituyendo al gobierno y por tanto el choque es inevitable.

El asunto es, ¿por qué no tuvo antes esta actitud dura con las Comunidades Autónomas? Pues porque no está en su esencia, porque hemos tenido un gobierno socialdemócrata, que no ha querido ser exigente en términos fiscales, que ha reducido el gasto público pero muy poquito, que no ha hecho los recortes necesarios porque no cree en los recortes.

Es decir, el malentendido que se ha organizado de manera intencionada sobre las intenciones fiscales de este gobierno ha sido increíble. Acusar al Señor Montoro de ser el Tío Gilito que está ahí atesorando es de traca.

Subió los impuestos solo a una parte. En la subida aumentó la progresividad de nuestro perfil impositivo y en la bajada que vino después se los bajó a los que menos pagaban. Por tanto volvió a aumentarla. Es decir, su estrategia fiscal desde el punto de vista de los impuestos ha sido siempre de un izquierdismo bastante socialdemócrata.

Desde le punto de vista del gasto ¿quién le puede acusar de haber cortado el gasto público de forma radical? Es increíble que Montoro pase a la historia como un austericida ¡Un ministro que acaba con 56000 millones de gasto sobre los ingresos!

La conjetura que hace la Autoridad Fiscal Independiente hay que enmarcarla en la política que vamos a tener de aquí a 6-7-8 meses. Si el gobierno cambia, si hay un gobierno de “progreso y reformista” entonces la bomba va a ser esa y que se entiendan entre ellos. Pero si no cambia, es decir, si el PP conserva de alguna manera alguna responsabilidad de gobierno en el área económica, va a tener que cambiar radicalmente la estrategia socialdemócrata que han tenido en los últimos cuatro años.

No van a poder seguir diciendo: sí, somos de derechas pero nosotros mantenemos los hospitales abiertos sin copago, mantenemos todo el sistema de enseñanza financiado sin copago… eso va a tener que cambiar.

Porque al final por muchas distinciones geográficas que hagamos de las Comunidades Autónomas que son todas ciertas, es decir, estamos en un sistema derrochón, el problema de base es en qué se gasta. Y se gasta ciertamente en Embajadas y en televisiones públicas, pero sobre todo se gasta en sanidad, en enseñanza, en pensiones que es otro problema serio. Habrá que dar otra vuelta a la reforma de las pensiones. O restringimos en los gastos de pensiones, o subimos las cotizaciones sociales o jugamos a la lotería a ver si nos toca.

Lo que quiero decir es que si hay una segunda oportunidad de este equipo de gobierno o algo parecido, su orientación económica va a tener que ser muy diferente. Eso de que el Ministro de Economía de un gobierno conservador llegue al Parlamento y diga: «estos son unos presupuestos muy sociales» haciéndose perdonar porque no aumenta el gasto público, se va a acabar.

Cuando tú tienes un problema presupuestario como el que tiene España eso no se puede mantener.

@lodares

Economista

8 abril, 2016

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