Los que nos decían que el Brexit iba a ser fantástico y maravilloso parece que no tuvieron sus mejores días cuando auguraban tal cosa. El Brexit se empieza a complicar, o al menos la teatralidad ha aumentado.

Probablemente el Reino Unido y sus principales dirigentes ( algunos de ellos muy favorables al Brexit) no han estado dando los mensajes adecuados desde que ganaron el Referéndum. Eso no ha ido sentando bien a la Unión Europea, porque entre otras cosas la Unión Europea tiene algo que decir en el proceso de negociación.

Han estado viendo que quieren el mismo acceso al mercado único,  prácticamente quieren lo mismo pero sin contribuir igualmente, sin aceptar la libre circulación de personas… eso ha ido creando una cierta mala sintonía.

Llevamos así muchos meses y eso al final hace que los cuchillos hayan salido a la luz y sobre todo parece ser que algunos de los planteamientos que están haciendo los británicos son inaceptables. Eso nos genera mucha incertidumbre porque España por descontado que tiene que estar con los 27, pero somos de los países con una mayor exposición,  con lo que cualquier mal acuerdo a nosotros nos puede afectar.

100.000  millones de euros son los dineros que tenía comprometido el Reino Unido en políticas europeas. Estamos hablando hasta el 2019 y algunos programas llegaban hasta el 2020, incluso más allá.  Son compromisos y cuando alguien quiere salir, por lo menos hay que hablar de ellos y ver cómo se pueden acomodar. Reino Unido es además contribuyente neto de la Unión, aunque algunos sres (como la Universidad) recibe más de lo que da.

Yo creo que aquí la clave es que se adopte una visión más realista, que no se intente engañar a la gente. Parece que el gobierno británico quiere que no haya transparencia y democracia ¡Cómo puede ser eso en el Reino Unido! ¡La cuna en teoría de la transparencia y de la democracia!

Aquí hay  líneas rojas: acceso al mercado único sin libertad de movimiento de personas y que no quieren saber nada del Tribunal Europeo de Justicia.  Así es muy difícil llegar a un acuerdo. Algún tipo de mensaje en esas cosas tiene que haber, porque al final pues Noruega, Suiza han podido negociar una solución muy hecha a medida, pero eso es lo que dificulta la situación.

Si ellos entran en el mercado único y hay un conflicto ¿Quién lo resuelve? ¿No lo resuelve el Tribunal de Justicia Europeo o no tiene algo que decir? Lo están poniendo realmente difícil los británicos.

Álvaro Lodares (Economista)

@lodares