Opinión

A por ellos: se lo han ganado

El catalanismo separatista, chulo, despectivo y acusando al resto de España de lo que son ellos -dictatorialistas/supremacistas/racistas y fascistas – se ha ganado las despedidas de agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil, desde diferentes provincias andaluzas, al grito de «A por ellos», cuando aquellos han iniciado su traslado a Cataluña para reforzar el dispositivo de seguridad contra el ilegal e ilegítimo referéndum del 1 – O .

Ante este grito  indignado, lógico y perfectamente explicable ante el hartazgo de esta prolongadísima  y estúpida rebelión catalanista/separatista, el catalanismo que se las tira de «moderado/independentista» se queja de que la libertad de expresión de quienes así han expresado su indignación y su apoyo a los agentes no puede amparar ni impregnar el talante de actos oficiales como el de la Comisaría de Campo Madre de Dios (¡que  nombre tan hermoso!) de Córdoba. Pues yo les doy la enhorabuena y mi felicitación porque ya era  hora de escuchar voces populares y espontáneas contra la traición y sedición de estos catalanes enloquecidos.

Se quejan estos «moderados traidores» de que nunca antes, en las despedidas de efectivos militares o policiales  que participaban, por ejemplo, en misiones antiterroristas, se han visto ni oído, por parte de la ciudadanía, arengas semejantes. Pues eso les dará una idea clara del odio que vienen sembrando desde hace años con su «superiorismo» despectivo y secesionista, considerado por la ciudadanía española peor que el fanatismo terrorista, siempre injustificable pero más comprensible, lo que no es la locura independentista catalana. Hasta ahí nos han llevado; hasta el odio.

Ahora todo se vuelve, desde el pretendidamente  «moderado» separatismo del falso y antiespañol derecho a decidir su futuro de cada parte del territorio nacional, hacerse las víctimas  de la represión del Estado y el odio del  resto de los españoles. Se dedican a recordar como el Premio Nobel de la Paz Desmond Tutu afirmaba que «hay que tener cuidado con lo que se dice del adversario porque la paz siempre se hace con el enemigo». Se olvidan de que, después de estos seis años de rebelión insoportable, los españoles de corazón ya no queremos la paz con estos traidores sino que sean reprimidos, sometidos y en sus dirigentes e instigadores duramente castigados.

Si me permiten el símil futbolístico este no es un partido para empatar, ganar o perder por la mínima. Es un partido para que el estado lo gane por diez a cero, que bastante ha esperado ya, y nos ha hecho esperar humillados e indignados a todos los españoles, para someter y sofocar de una vez esta rebelión traidora y sediciosa. Y éso se hace con  la fuerza; así  que, efectivamente , «A POR ELLOS» .

Manuel Monzón

2 octubre, 2017

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *