El recorte que anunció el Ejecutivo que regenta el Consistorio de la capital, Ahora Madrid, se pone en marcha. Y es que desde este mes de enero, las ayudas y rebajas en las instalaciones deportivas y piscinas municipales de Madrid, han dejado de existir.

Hasta 2016, los madrileños usuarios de cualquiera de los abonos deportivos vigentes (total, reducido, fin de semana, familiar o uso libre) podían recibir una clase al mes de manera completamente gratuita sin ningún tipo de coste adicional. Lo que hasta el momento suponía una novedosa oportunidad a día de hoy, quien quiera disfrutarla, deberá de pagar el 25% del precio de la actividad.

La decisión, que ha afectado a más de 7.560 usuarios no ha sido bien recibida. De hecho, desde los propios sindicatos se ha hecho saber la sensación de malestar.

«La gente está bastante molesta porque no se lo esperaba. El Ayuntamiento ha errado en su valoración de la situación, sobre todo después de haber intentado acercar el deporte a todos los madrileños con tarifas más sociales».

Pero las críticas, también han llegado a través de los propios madrileños. «No solo no me han bajado el precio del abono sino que ahora me cobran por clases que antes no pagaba«, aseguraba una vecina del madrileño barrio de Hortaleza que suele acudir a las instalaciones del Centro Deportivo Municipal Luis Aragonés y que disfruta de un abono mensual.

Desde el Ayuntamiento de Madrid se ha reconocido el error y se ha mostrado la intención de modificar su criterio, pues según dicen, la intención ha sido en todo momento ampliar las prestaciones sin coste alguno.