Esta semana ha sido objeto de debate en el Ayuntamiento de Madrid la purga que quieren hacer los carmenitas en el callejero de la capital. Mientras enredan con estas cosas, permanecen entretenidos y no destruyen las inversiones y la economía madrileña, pero como están hechos de la misma pasta que un Rey Midas con complejo de chiquilicuatre, todo lo que tocan lo convierten en un circo. Y el callejero no iba a ser menos.

Confundir al espía que engañó a Hitler sobre el lugar donde se produciría el desembarco de Normandía con un propagandista de Franco, atribuir el bombardeo de Guernica a un presunto comandante que, en el momento del bombardeo era un soldado raso, o hacer responsable a un empresario vallecano fallecido en los años 20 de 3.000 muertes en la Guerra Civil, sólo puede deberse a tres variables o a una conjunción de las tres: sectarismo, ignorancia o desmemoria.

El hecho de confundir tan gravemente a personajes ilustres de la Historia española es absolutamente grotesco. Este es el semblante del proyecto piloto de Podemos en Madrid con proyección a hacer en toda España: destruir, olvidar y tergiversar nuestra Historia sin ningún pudor. Quieren y pretenden construir un nuevo país borrando la memoria al pueblo reescribiendo una Historia paralela al gusto de su sectarismo.

A la vista de los asesoramientos presentados, poco podemos esperar de esa Cátedra de Memoria Histórica de la Universidad Complutense de Madrid. Máxime, estando dirigida por la hijastra del hombre que lleva más de medio siglo tiranizando al pueblo cubano. Pero sí podemos y debemos apelar a la decencia de la señora Carmena.

Carmena no quiere ser recordada como la alcaldesa sectaria que revolucionó el callejero, y ella lo sabe. También sabe, que el informe de la UCM es una colección de patochadas y falsedades de imposible consistencia. Y en último punto, e invocando a su formación, sabe que la Historia de España no es la que cuenta la Complutense. Por si acaso lo ha olvidado, procuraré mandarle una caja de esos fármacos que anuncian en la radio que ayudan a la memoria. Lo que haga falta para que no confunda a héroes que ayudaron al florecimiento industrial de nuestra ciudad con genocidas. Entre otros.

Charlie Guadalix

Presidente de Nuevas Generaciones de Guadalix de la Sierra