Las declaraciones de los asistentes al Madrid Arena en la Audiencia Provincial están yendo en la misma línea. Dos de las jóvenes que declararon ayer en el juicio coincidieron en señalar las escasas medidas de seguridad que hubo a la entrada del recinto a todos los niveles.

Las jóvenes de ayer aseguraron en sede judicial que accedieron a la fiesta con documentación falsa, ya que ambas eran menores de edad en aquel momento (al igual que una de las fallecidas), porque les habían dicho que «en ese sitio no miraban mucho la documentación». Así lo afirmó la primera testigo en declarar, Sara Fraile, a quien, a pesar de ser menor, le dijeron que «en ese sitio» se podía pasar «perfectamente» con un DNI que no fuera el suyo. De hecho, cientos de menores habían comprado entradas para la Thriller Music Park a través de un relaciones públicas o de internet.

Otra joven, Ana Mendoza, corroboró esta versión. Ella reconoció que les pidieron el DNI, pero que no era el suyo y que sus amigas llevaban otros documentos de identidad cuya foto «ni se parecía a ellas». Esta testigo aseguró ayer en la Sala Cero de la Audiencia que «a las 3:00 horas no se podía estar en la pista» y por eso animó a una amiga a irse del recinto.

También testificó ayer Javier Valhondo, uno de los jóvenes que se encontraban en la parte superior de la avalancha y que pudo grabarla con su móvil. Dijo que vio cómo personas «con chaleco amarillo» ayudaron a sacar a personas del tapón humano y «no dejaban pasar a más gente».